Gracias a Dios en primer lugar. Luego al bloque Somos Vida y Libertad junto a Amalia Granata, a cada uno de los asesores y colaboradores, a las organizaciones presentes, a mi esposa Nieves y mis 2 hijas. Pero en especial manera a mi mamá Isabel Birocco, una mujer que marcó mi vida con su testimonio y que me tocó despedirla hace poco tiempo.
